La EdAd De La InOcEnCiA ::: El efecto Fujimori

Cuando yo tenía 7 años, Alberto Fujimori comenzó su primer gobierno.

Cuando yo tenía 9 años, Alberto Fujimori disolvió el congreso y sacó tanques al patio de mi casa.

Cuando yo tenía 12 años, Alberto Fujimori le ganó las elecciones al notable peruano que estudiábamos en el colegio: Javier Peréz de Cuellar.

Cuando yo tenía 15 años, Alberto Fujimori salió en la televisión acompañado por Vladimiro Montesinos en una dudosa entrevista compartiendo corbatas y secretos.

Cuando yo tenía 17 años, Alberto Fujimori postula por tercera vez a la presidencia de mi atolondrado país. Papelito manda, cambiamos de siglo y pero no de gobernante.

Cuando yo tenía 19 años, Alberto Fujimori toma un avión hacia Japón, renuncia por fax al cargo al que se había aferrado por tanto tiempo. Dice haber nacido en esa hermosa tierra del sol (naciente); y yo fundo un cineclub proyectando EL PADRINO.

Cuando yo tenía 21 años, Alberto Fujimori está amnésico, no se acuerda de Barrios Altos, de La Cantuta, de su socio Vladimiro, de los Psicosociales, los videos comprometedores y menos de la corrupción.

Cuando yo tenía 22 años, Alberto Fujimori viaja sorpresivamente al amigable país de Chile. “Chino de risa” señala que esto es parte de una estrategia para volver a reencontrarse con los peruanos que tanto amó. Lastima que yo ya había perdido el sentido del humor.

Ahora yo tengo 24 años, y Alberto Fujimori yace en una cómoda celda peruana esperando los procesos judiciales que se le vienen. Mi país está polarizado; se realizan protestas pidiendo la cabeza del ex-mandatario. Una vez acabadas las manifestaciones, es retirado todo aquello que nos ayuda a recordar.

Fotos:Esepequeñosalvaje